Los trofeos de un vecino indeseable de Malvinas Argentinas

Foto de Página 12

APCS-MA por Jorge P. Colmán. El viernes se realizaron varios allanamientos en las viviendas de los genocidas Santiago Omar Riveros y Albano Harguindeguy, ubicadas en 3 de Febrero 1950 y en Eva Perón 1331 (Bº Los Nogales), de Los Polvorines, Partido de Malvinas Argentinas. El procedimiento se incribe en la causa “Campo de Mayo” (Nº 4012/03) en la cual también se allanó el domicilio del reo Jorge Rafael Videla.

El reportaje que realizó el periodista Ceferino Reato a Jorge R. Videla en la prisión, disparó la búsqueda de listas de deseaparecidos o a desaparecer durante el mal llamado "Proceso" militar. En ella se menciona la complicidad de la "pata civil" del golpe cívico-militar. Con estos elementos los abogados de los organismos de DDHH realizaron una denuncia que impulso los allanamientos solicitadas por la jueza Alicia Vence.

Una vez más la historia sobre el genocidio argentino pone sus ojos sobre el Partido de Malvinas Argentinas. Una vez más los nombres de aquellos que protagonizaron la cacería humana, su cautiverio en los CCD (Centros Clandestinos de Detención) y posterior eliminación aparecen en los diarios nacionales y la justicia. Por Campo de Mayo pasaron el comandante Santucho del ERP. No casualmente allí se instaló el museo de la Subversión, donde se exibían los trofeos humanos del salvajismo militar.

Santiago Omar Riveros fue el amo y señor cuando fuera jefe de la zona 4 . Su curriculum no deja duda de lo ocurrido en la región, practicamente no dejo sobrevivientes.

Leyendo los documentos obtenidos y las fotografías vistas en la causa, podemos observar los "trofeos" de los homicidas. El interior de la casa de Albano Harguindeguy se dejan ver animales cazados que adornan las paredes, son las muestras de un hombre que se impuso sobre las bestias, sobre el salvajismo animal. Una imagen que sigue viva en personajes reprochables como el Rey de España posando junto a un elefante asesinado/cazado mientras su pueblo se sume en la pobreza.

En la lista que publica Página 12 podemos encontrar materiales que podríamos considerar "trofeos" de los asesinos.

- Una carpeta “Informe cumplimiento de gestión 1979 y Plan de Acción 1980”.
- Una carpeta llamada “Secreto Pautas de la Junta Militar al P.E.N. (Poder Ejecutivo Nacional) para ejercicio de la acción de gobierno 1981-1984”.
- Una carpeta con Partes de Inteligencia.
- El libro “Bases políticas de las Fuerzas Armadas para el proceso de reorganización nacional 1979”.
- El libro Documentos básicos del proceso de reorganización nacional de 1979.
- Una carpeta “Bases políticas del Ejército para el Proceso de Reorganización Nacional”.
- Una carpeta “Exposición de SE del señor ministro del Interior 09-Mar-77”.
- Una carpeta llamada “Directiva 1/77 - Directiva 2/77 - Directiva 3/77”, importantes porque alguna de esas directivas aún es desconocida.
- Una carpeta sin título que en su primera hoja dice: “Entrevista con el señor gobernador de Córdoba”.
- Una carpeta “Primeras bases para la propuesta de unión nacional”.
- Una carpeta “Exposición del señor ministro del Interior ante el gabinete nacional, 17 de marzo de 1978”.
- Una carpeta “Orientación del comandante en jefe del ejército año 1980”.
- Una carpeta “Ministerio del Interior Plan de Acción de Gobierno 1979”.
- Una carpeta “Pautas de la Junta Militar al Poder Ejecutivo Nacional”.
- Tres revistas Estrella Roja del ERP, números 22, 27 y 29.

En particular estos últimos mencionados no coinciden con los anteriores, son revistas que difícilmente formarían parte del bagage ideológico del ex-militar. Son provablemente "trofeos de guerra". Una "guerra contra los subversivos", considerados salvajes y ajenos a la sociedad occidental y cristiana.

Durante los operativos militares, era común que los participantes (militares y/o servicios de inteligencia) se llevaran/robaban "trofeos de guerra" (elementos de valor comercial, documentos y revistas). En la ESMA tenían un lugar fijo para estos propósitos.

Una curiosidad recorre nuestras cabezas: que interesante sería saber el orígen de esas revistas, quienes fueron sus legítimos dueños y donde se encuentran. Es en ese momento, cuando esas revistas dejaran de ser trofeos para los genocidas, para transformarse en documentos de historia de vida y lucha del Pueblo.